Versículo clave: "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas." — 2 Corintios 5:17
El pasado puede convertirse en una carga pesada. Los errores, las malas decisiones y las heridas pueden hacernos sentir atrapados, como si nunca pudiéramos empezar de nuevo. Pero en Cristo, cada día es una nueva oportunidad. Él no solo perdona nuestro pasado, sino que nos transforma y nos da un nuevo propósito.
Pablo, quien escribió este versículo, era un perseguidor de cristianos antes de encontrarse con Jesús. Sin embargo, su vida cambió radicalmente cuando entendió la gracia de Dios. Esto nos muestra que no importa lo que hayamos hecho, Dios puede hacer algo nuevo en nosotros.
Ser una "nueva criatura" significa dejar atrás la antigua manera de vivir y permitir que Dios renueve nuestro corazón y nuestra mente. No se trata solo de cambiar hábitos, sino de experimentar una transformación profunda a través del Espíritu Santo. En Cristo, no estamos definidos por nuestro pasado, sino por la vida nueva que Él nos da.